Sobre el programa...
Billy Budd regresa al Festival de Glyndebourne. Una ocasión especial para celebrar el centenario de su autor, Benjamin Britten. La obra cuenta la trágica historia del guapo, valiente y honesto marinero Billy, que es condenado a muerte por matar a su superior sin darse cuenta.
El barítono Jacques Imbrailo nos comenta la inocencia y pureza de su personaje:
"Esta manera de ver la vida, de ver a la gente, de reaccionar a las cosas es diferente. Es por eso que destaca en el barco. Es una persona muy positiva que ve lo mejor de cada persona y mentiría si dijera que soy como él. Es mucho más amable que yo. Cuando estoy nervioso tiendo a tartamudear un poco, así que comprendo como actúa cuando está en esa situación. También soy joven y eso ayuda pero no durará mucho".
"El capitán Vere se debate entre lo que parece el mal absoluto que representa John Claggart y la bondad total de Billy Budd. El personaje está en el medio y de alguna manera está confuso", apunta Mark Padmore, que hace el personaje del capitán Vere.
La historia está contada desde el punto de vista de un capitán al mando de un barco de guerra británico perdido en medio del océano y la niebla. Una metáfora de la claustrofobia y aislamiento que viven los personajes.
"Lo más difícil para el capitán Vere es que reconoce que amar a Billy es imposible. La homosexualidad estaba prohibida incluso en Inglaterra cuando la ópera fue escrita, en 1951. Gracias a la obra comprendemos que el amor entre hombres no es posible, que está prohibido y es tabú pero que se puede seguir sintiendo", añade Padmore.
El Festival de Glyndebourne lleva casi ochenta años atrayendo a un público elegante que entre acto y acto disfruta de un largo picnic campestre.
"Billy lucha por lo que considera correcto. Hacer el bien es lo mejor para él y lo que está bien, está bien hecho. Le gusta que las cosas sean justas y creo que entiende que al haber matado a un hombre tiene que morir como dice la ley. Desde mi punto de vista, eso se ajusta a su inocencia, el hecho de que si es lo correcto, es lo que se tiene que hacer", añade Jacques Imbrailo.
Esta representación de Billy Budd está dirigida por Sir Andrew Davies, gran intérprete y admirador de Britten.
"Las óperas de Britten aguantarán bien el paso de los años en los próximos siglos. Y a partir de ahora se las considerará como las obras maestras que son. Lo que obsesionó siempre a Britten fueron las pasiones y los problemas que sufrían las personas por tener un carácter que chocaba con el de otras personas", concluye Davies.