Sheku Kanneh-Mason y Harry Baker en un programa clásico, jazz y pop, con improvisaciones

Nacido en 1999, el excepcionalmente talentoso violonchelista británico Sheku Kanneh-Mason ha logrado ya establecerse como uno de los músicos más extensamente aclamados del mundo, celebrado tanto por la crítica como por el público. Se trata de uno de los siete Junge Wilde (literalmente, «jóvenes salvajes»: refiriéndose a jóvenes artistas en la vanguardia que buscan redefinir su manera de hacer arte) desde el Konzerthaus Dortmund, presentando prometedores artistas ascendiendo a la fama en su hábitat natural: una sala de conciertos de clase mundial con una acústica excepcional.

Para la ocasión, Kanneh-Mason suma su talento al del pianista Harry Baker en un programa verdaderamente pensado de forma inusitada, con una curaduría única y memorable en la que conviven clásico (en arreglos para violonchelo y piano hechos por el propio dúo), siglo XX y siglo XXI, con canciones populares, standards de jazz e improvisaciones para una propuesta refrescante desde Bach, Mahler, Nadia Boulanger, Herbie Hancock Gwilym Simcock y hasta Big Thief y San Fermin: un programa con influencias tan diversas que garantizan un trabajo no obstante cohesivo y exquisito.

Sheku Kanneh-Mason aparece gracias a la amable autorización de Decca.

Fotografía © John Davis